España es un lugar ideal para generar energía solar fotovoltaica ya que tiene una media anual de 3.000 horas de luz. Y esta cifra aún es mayor en zonas costeras que son destinos vacacionales habituales, como la costa catalana, la levantina o las Islas Baleares.
Tanto si eres de los afortunados que ya disponen de una segunda residencia, como si estás pensando en adquirir una, hay un tema que siempre está puesto sobre la mesa: los gastos vinculados al consumo de electricidad.
Y es que, aunque la vivienda sólo se utilice temporalmente, la tarifa de la luz se ve sometida a mismas subidas de la luz que la de la vivienda habitual. Además, aunque no se esté en la vivienda y el consumo de electricidad sea muy pequeño, se tiene que pagar un fijo todos los meses por la potencia que se tenga contratada. Y si se reduce al mínimo esa potencia para así reducir el coste, en el momento en el que se esté de manera continuada en la vivienda, será complicado que mantener encendido el aire acondicionado o el horno, sin que salte la luz.
Por ello, resulta muy interesante estudiar la opción de instalar paneles solares aunque sea una segunda residencia. Un tipo de energía cada vez más popular y que cuenta con interesantes ayudas y subvenciones al autoconsumo en todas las comunidades autónomas.
Principales ventajas de instalar paneles solares en una residencia de verano
Despreocúpate de gastos inesperados. Imagínate no tener que estar pendiente del precio de la luz si quieres encender tu aire acondicionado en tu residencia de verano, o cualquier otro sistema de climatización, o evitar el susto de la factura tras haber puesto tu vivienda en alquiler. Instalar energía fotovoltaica en una segunda vivienda te evitará más de un dolor de cabeza.
Incrementa el valor de tu segunda vivienda. Uno de los motivos que incitan a la compra de una segunda residencia es el de invertir en un inmueble a futuro. E instalar un sistema de energía solar de autoconsumo agrega más valor al inmueble, ya que los potenciales compradores verán la ventaja de ahorrar en energía sin tener que invertir en ello
Proteges la naturaleza y el medio ambiente. En los últimos meses estamos siendo testigos del cambio climático y las consecuencias que genera en nuestro día a día y en nuestro entorno. El constante aumento de emisiones de CO2 a la atmósfera está generando un aumento de la temperatura del planeta. La fotovoltaica es un tipo de energía que no produce emisiones de CO2, lo que contribuye a reducir el efecto invernadero y tu impacto sobre el planeta.
Por ejemplo, en una vivienda unifamiliar, una instalación básica de 7 paneles solares de 2,38 kWp de potencia con 25 años de vida útil, evita la emisión de 38 toneladas de CO2 en 25 años y la tala de 1.950 árboles.
Puedes lograr la autosuficiencia energética… Además de convertirte en un amigo del planeta, puedes llegar a ser autosuficiente si instalas un sistema de autoconsumo aislado. No sólo evitarás que te afecten las variaciones en el coste de la luz, sino que además conseguirás una vivienda autosostenible desde el punto de vista energético. Optando por una instalación de paneles solares con baterías de almacenamiento, te independizas de la red eléctrica convencional y usas la energía autogenerada y almacenada.
Y cuando tú no estás… Se requiere poco mantenimiento y puedes vender los excedentes. El mantenimiento se debe realizar una vez al año y tan solo para comprobar si los paneles están transformando y enviando correctamente la energía a la red de la vivienda. Con la energía que estás generando, puedes mantener algunos dispositivos eléctricos encendidos como el frigorífico, el congelador, simuladores de presencia, domótica… que garantizan el funcionamiento de la casa e incrementan, a su vez, la seguridad. Además, no olvides que puedes vender los excedentes de energía que no utilices y obtener una compensación económica en tu factura.
¿Cómo instalar fotovoltaica en mi segunda residencia?
El primer paso que te recomendamos es solicitar a una empresa especializada en energía solar un estudio personalizado sobre tu vivienda, tus hábitos de consumo y el tipo de instalación de autoconsumo más adecuada.
En nuestro caso, este estudio lo realizamos de manera totalmente gratuita y sin compromiso y puedes solicitarlo en este enlace: estudio para instalación de placas solares.
En ese estudio además de conocer el coste de la instalación y los materiales que se te incluirán, debe aparecer información sobre el periodo de amortización o la rentabilidad, para que puedas comprobar si te compensa instalar placas solares y económicamente tengas todo claro desde el primer momento.
Y una vez que te decidas a pasarte al autoconsumo, los proyectos de instalación de placas solares en segundas viviendas suelen ser proyectos sencillos de realizar. La instalación suele realizarse en sólo dos días, con unos sistemas de anclaje que no dañan la cubierta y sin necesidad de hacer obras ni cortes en el suministro.